Unos virtudes que la desatan a la cima del cielo para
adorarla, pues mujer luchadora como ella enamora y también su sonrisa, que
sonroja cualquier rostro de encanto pues su perplejo espíritu de perseverancia
la hacen una mujer de novela, como la actriz que tanto sufre, pero no dude que
al final de este camino, año tras año, sobrepasando obstáculos, y pasar por
llantos, llegara al eden, como en un tren, que sin barrera, llega a la
felicidad eterna, solo le auguro cosas buenos, presentimientos que me invaden,
y me obligan a darle a conocer al mundo, los valores de la bondad, la
tolerancia, generosidad y entrega, en una sola persona, llamada Mayra que en
este planeta, hará florecer la luz eterna.